Morelia, Michoacán, 27 de junio de 2025.- En un hecho sin precedentes, el Congreso del Estado de Michoacán aprobó por unanimidad la reforma constitucional que reconoce a la Lengua de Señas Mexicana (LSM) como lengua oficial y parte del patrimonio lingüístico estatal. Esta decisión, impulsada por la diputada local Emma Rivera Camacho, presidenta de la Comisión de Puntos Constitucionales, representa un avance significativo en la lucha por los derechos y la visibilidad de la comunidad sorda en la entidad[1][2].
Reconocimiento y justicia social: la voz de Emma Rivera
Emma Rivera destacó que esta reforma es fruto de un trabajo responsable y comprometido, que incluyó la escucha activa a personas sordas y sus organizaciones, quienes han demandado durante años igualdad y acceso pleno a sus derechos. La diputada calificó la aprobación como un acto de justicia social y un gesto humanista que visibiliza a una comunidad históricamente marginada.
“Reconocer a la LSM en la Constitución del Estado significa comenzar a construir un Michoacán donde el derecho a la comunicación y a la inclusión sea una realidad para todas y todos”, afirmó Rivera[1].
Barreras superadas y nuevos retos
Durante el proceso legislativo, la Comisión de Puntos Constitucionales llevó a cabo reuniones con asociaciones de personas sordas y realizó ejercicios prácticos sin intérprete para evidenciar las barreras comunicativas que enfrentan cotidianamente. Esta experiencia motivó a la diputada a proponer que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) levante datos específicos sobre esta población, con el fin de diseñar políticas públicas fundamentadas y con enfoque inclusivo.
La reforma, sin embargo, no es un punto final, sino el inicio de una ruta para que la inclusión se traduzca en acciones concretas en educación, servicios pú